Algunos niños y jóvenes pueden padecer enfermedades o lesiones que tengan como consecuencia una larga estancia en el hospital. Es en estos casos, la pedagogía hospitalaria es totalmente necesaria, ya que tiene el objetivo de que los pacientes puedan seguir con su aprendizaje, procurando que los estudios no se vean interrumpidos. Si te interesa esta área de forma profesional, contamos con una Maestría Internacional en Pedagogía Hospitalaria. Accede y conviértete en especialista de este sector tan enriquecedor.

¿Qué se entiende por pedagogía hospitalaria?

¿Alguna vez has oído hablar de la pedagogía hospitalaria? La finalidad de este ámbito asegurar la calidad de vida y el bienestar de las personas que están ingresadas en un centro hospitalario. Se trata de una rama de la pedagogía social que se hace cargo de reforzar la asistencia social y de hospitalización que sean necesarias para responder a las necesidades del paciente.

Por lo tanto, esta área de la sanidad reduce las consecuencias o el impacto que produce esta situación a las personas involucradas. Para ello, trabaja con los niños y niñas con problemas de salud y elabora programas de intervención personalizados desde que el niño/a ingresa en el hospital. También está enfocada en las personas que acompañan a los pacientes durante su estancia en el hospital. Se les ofrece una atención individualizada y se tienen en cuenta sus necesidades.

¿Qué puede hacer un pedagogo en un hospital?

La pedagogía en el ámbito sanitario intenta continuar con el desarrollo personal y educativo de los más pequeños que están ingresados. Además, hay que tener en cuenta que pueden surgir alteraciones psicológicas en el tiempo que el niño se encuentra hospitalizado. Con el cambio que supone el ingreso en un hospital (estar lejos de su casa y su familia, tener nuevos hábitos, etc.), el pedagogo hospitalario hace que todo el procedimiento sea mucho más cercano.

  • Estudia e identifica las necesidades de los pacientes durante su estancia en el hospital. También tiene en cuenta las necesidades de los familiares o allegados del paciente.
  • Determina el impacto que supone para la persona esa enfermedad o el ingreso en el centro hospitalario.
  • Tras toda la información obtenida, se hace cargo de diseñar un protocolo de actuación para que todos los profesionales involucrados en el proceso (sanitarios y docentes) normalicen la calidad de vida del paciente y sus familiares.
  • Se aseguran que los niños y adolescentes ingresados continúen con sus estudios durante su ingreso. Además, se adaptan los métodos de aprendizaje a cada persona.
  • Hace llegar toda la información sobre la enfermedad al paciente y sus familiares.

¿Dónde se aplica la pedagogía hospitalaria?

Seguramente hayas oído hablar en algún momento sobre el aula hospitalaria. Consiste en un espacio dentro del hospital en el que los niños y adolescentes disfrutan de la formación académica. De hecho, la intención es que sea percibida como un aula de escuela a la que asisten jóvenes de distintas edades.

En otros casos, pueden darse ciertas condiciones para que el proceso educativo se lleve a cabo en la habitación del paciente. También, cuando el paciente debe quedarse en el domicilio, el educador tiene la opción de desplazarse hasta allí. Durante todo este proceso, sin importar en el lugar que se aplique, es imprescindible la participación de los profesionales de la salud, los servicios sociales, educadores y el ámbito familiar más cercano.